Giovanni Flores Leiva avanza con paso seguro por el sendero, trazando el camino para aquellos que buscan sumergirse en la naturaleza y deleitarse con sus maravillas. Como guía especializado en excursionismo, certificado y apasionado, lidera a los aventureros que eligen vivir la experiencia de sentir el crujir de las hojas secas bajo sus pies, contemplar los primeros destellos del sol y maravillarse con las vistas espectaculares del paisaje que define al municipio de Amealco, Querétaro, un rincón mágico reconocido como Pueblo Mágico.

En una charla con EL UNIVERSAL, Giovanni comparte cómo su destino tomó un giro inesperado durante sus años de formación. «Nunca imaginé que esto sería mi camino», reflexiona. «Cuando estudiaba, pensaba que acabaría trabajando en hotelería o en una agencia de viajes. Sin embargo, todo cambió cuando unos alemanes y jóvenes de Guadalajara me contactaron a través de Facebook buscando una experiencia de senderismo.»

«La primera vez que guié a clientes en una ruta de senderismo, hace ya nueve años, fue reveladora», recuerda Giovanni con una sonrisa. «Mostrar los tesoros de Amealco de manera profesional me abrió los ojos a la posibilidad de convertir mi pasión por el turismo en mi sustento. Desde entonces, supe que este era mi camino, mi forma de vida.»